viernes, 15 de marzo de 2024

La democratización del conocimiento psicológico: el legado de Eric Berne y el Análisis Transaccional

 

"El A.T. rechaza toda terminología compleja y farragosa que utilizan tanto la
psicología como otras ciencias, ya que sólo sirve para intentar crear «clases» y, en muchos casos, a través de corporativismos baratos, disimular grandes complejos de inferioridad.

 Algunos ignorantes creen que porque no se utilizan términos extraños y complejos, el A.T. es menos científico; su único problema es que no lo conocen «a fondo» (por eso, lo de ignorantes)"

Las claves del comportamiento humano: 
Análisis transaccional aplicado al autoconocimiento
 y a la comprensión de las personas.
Juan Manuel Opi Lecina


Culto es aquel que puede comunicar al nivel de su interlocutor, utilizando su lenguaje en función de la comprensión del otro. Y cuando se dirige a muchos, su nivel se adapta al mas bajo.
Definición de "culto" de mi padre
José González Alarcón
Maestro de escuela 


Eric Berne fue el fundador del análisis transaccional, una teoría psicológica que se centra en el estudio de las interacciones sociales y la comunicación humana. Su legado incluye no solo el desarrollo de esta teoría, sino también su esfuerzo por difundir el conocimiento psicológico de manera accesible y comprensible para todos. 

1. Accesibilidad: Desmitificando conceptos y utilizando un lenguaje comprensible para todos. Al hacerlo, permitió que personas ajenas al mundo de la psicología pudieran beneficiarse de sus ideas y aplicarlas en sus vidas cotidianas. 

2. Democratización del conocimiento: Al rechazar la terminología compleja y hacer que el Análisis Transaccional (AT) sea comprensible para todos, Berne contribuyó a democratizar el conocimiento psicológico. Esto significa que cualquier persona, independientemente de su formación académica, puede entender y aplicar los conceptos del AT en su vida diaria.

3. Eliminación de barreras: Al utilizar un lenguaje claro y accesible, el AT elimina las barreras que puedan existir entre la psicología y las personas comunes. Esto permite que cualquiera pueda beneficiarse de las ideas y herramientas del AT sin sentirse intimidado por la jerga técnica y especializada.

4. Rigor científico: Aunque el AT evita la terminología compleja, esto no implica que carezca de rigor científico. De hecho, el enfoque práctico y comprensible del AT se basa en una sólida base teórica y empírica. La simplicidad del lenguaje no resta validez ni cientificidad a sus principios y métodos.

Diagnóstico de los Estados del Yo explicado a un niño



Imagina que los Estados del Yo son como distintas partes de tu mente que toman el control en diferentes momentos. Para entender qué parte utilizas en un momento dado, los facilitadores utilizan un diagnóstico. Es como si estuvieran tratando de descubrir quién está a cargo en tu mente en ese momento.

Hay cuatro niveles de diagnóstico:

  1. Conductual: Aquí, los facilitadores observan cómo te comportas. Miran cosas como tu tono de voz, las palabras que usas, cómo mueves tu cara y cuerpo.
  2. Social: Este nivel se enfoca en cómo afectas a las personas que te rodean. Los facilitadores preguntan a las personas cercanas a ti qué partes de tu mente parecen estar activas cuando interactúas con ellos.
  3. Histórico: Aquí, buscan entender cómo te has sentido y qué has hecho en situaciones similares en el pasado. También investigan cómo se comportaban las personas cercanas a ti en esas situaciones.
  4. Fenomenológico: Este nivel es más sobre tus propias experiencias internas. Los facilitadores te preguntan qué sientes y qué piensas cuando estás en diferentes estados mentales.

Un tipo de herramienta que utilizan para ayudar a entender estos estados mentales se llama "Egogramas". Son como dibujos que muestran cuánto tiempo y energía gastas en cada parte de tu mente. Por ejemplo, si pasas mucho tiempo en tu "Padre", esa parte de tu mente se mostrará más grande en el dibujo. Si estás más en tu "Niño", entonces esa parte se verá más grande.

Así, los facilitadores pueden entender mejor cómo funcionas en diferentes situaciones y ayudarte a manejar tus emociones y comportamientos de manera más saludable.

vamos a describir un ejemplo práctico de cómo se pueden ver los Estados del Yo en una situación cotidiana:

Diagnóstico de Estados del Yo:

Nivel Conductual:

Imagina que estás en casa con tu familia durante la cena. Mientras hablas con tu hermano sobre lo que hicieron durante el día, observamos que usas un tono de voz fuerte y firme, y tus gestos son en su mayoría serios. Esto podría indicar que estás en un estado mental más "Padre", adoptando un papel de autoridad o responsabilidad en la conversación.

Nivel Social:

Preguntamos a tu hermano cómo te percibe durante la cena. Él nos dice que a veces pareces ser muy protector y crítico, como si estuvieras tratando de corregirlo o enseñarle cosas. Esto confirma nuestra observación de que estás mostrando un estado mental más "Padre" en la interacción social.

Nivel Histórico:

Recordamos situaciones similares en el pasado donde has actuado de manera similar. Por ejemplo, en ocasiones anteriores durante las comidas en familia, también has tomado un papel de liderazgo o has tratado de guiar a tu hermano.

Nivel Fenomenológico:

Te pedimos que reflexiones sobre cómo te sientes y qué piensas cuando te encuentras en situaciones como esta. Expresas que a veces te sientes estresado por asumir tanta responsabilidad, pero también te sientes orgulloso de poder ayudar a tu hermano a aprender y crecer.

Egograma:

Representamos gráficamente tus estados mentales usando un egograma. En el dibujo, la parte que representa tu "Padre" es más grande que las otras dos partes (Adulto y Niño), lo que confirma que pasas más tiempo en ese estado mental durante la cena en familia.

Este diagnóstico nos ayuda a entender mejor cómo te comportas y cómo te sientes en diferentes situaciones, y nos brinda información valiosa para ayudarte a manejar tus emociones y comportamientos de manera más saludable.

viernes, 8 de marzo de 2024

Seguridad y Crecimiento: Las dinámicas de los Estados del Yo

Estados del Yo


Gracias a no fiarnos hemos llegado hasta aquí, hemos tenido que ser radicales desde tiempos ancestrales para filtrar y protegernos de los peligros para nuestra supervivencia, incluso aunque ya no estemos rodeados de depredadores (aparentemente), esa parte del celebro animal todavía no lo sabe. Sigue viviendo en la inospita selva aterradora donde cualquier movimientoo ruido es sospechoso. Algunos aprenden a calmar esa parte animal por imitación de su entorno, que lo aprendieron por herencia o por ampliar consciencia, otros nunca lo consiguen. 

En realidad, la clave está en tener desarrollada la parte del cerebro más joven, la del estado del yo Adulto, la parte cortical, que puede transformar los peligros en oportunidades, los desiertos en caminos y el vacío en recursos. La neuroplasticidad de nuestro cerebro ha de ser desarrollada por el estado del yo  Adulto, si no interviene el Adulto, nuestro cerebro funciona automáticamente, con las grabaciones del Padre y del Niño, imposibilitando nuevas elecciones y nuevas perspectivas.

Nuestra parte inconsciente se aferra a su zona de confort, aunque esto suponga obtener caricias negativas todo el tiempo. Es lo que sabe hacer, es lo que aprendió a obtener, recibió y le mantiene "viva" en el mundo, de momento.  En esta zona se mueven los estados del yo Padre y del yo Niño, que se activan ante estímulos que interpretan como peligrosos para su supervivencia y bajo la premisa de gastar la mínima energía.

Así, esta parte animal, primitiva, reptiliana, emocional y física, reacciona de forma rígida a eventos reales o imaginarios. Con patrones identicos que se aplican a cualquier área de nuestra vida. 

Veamos un ejemplo de dos casos que ilustran procesos de aprendizaje inconsciente derivados de experiencias dolorosas o traumáticas:

Estafa por mensaje fraudulento: Imagínate que te han estafado tras haber confiado en un mensaje de una entidad que pensabas que era segura. Después de ser estafado por un mensaje fraudulento, la persona aprende que responder a tales mensajes puede llevar a consecuencias negativas, como pérdida de dinero o violación de la privacidad. Como resultado, decide evitar mensajes o llamadas de remitentes desconocidos para protegerse de futuros engaños. 

Experiencias de fracaso y dolor en relaciones amorosas: De manera similar, las personas que han experimentado fracasos y dolor en relaciones pasadas pueden aprender a evitar futuras relaciones románticas para protegerse de más sufrimiento. Después de enfrentar situaciones dolorosas, como el engaño, la manipulación o el abuso emocional, estas personas pueden decidir que es más seguro y beneficioso evitar las relaciones íntimas por completo. 

Ambos casos muestran cómo el dolor y el sufrimiento actuan como poderosos catalizadores de aprendizaje, nos llevan a cambios en el comportamiento y decisiones enfocadas en evitar situaciones similares en el futuro, en las que la supervivencia y la economía de energía se interpretenn como amenazadas. 

El estado del Padre y del Niño necesitan tener todo controlado. Si no puedes asegurarles que todo está controlado o que obtendrán algún beneficio que compense el gasto de energía y esfuerzo no van a cooperar en salir de la "zona de conford" que "controlan". Esa es la tarea del estado del yo Adulto, nuestra parte pensante, que busca información, realiza conexiones nuevas, obtiene nuevas informaciones, etc.

Este diálogo interno podría ser la representación del proceso que se ha de producir internamente para que la plasticidad cerebral pueda funcionar:

Adulto: ¡Ey, equipo! Parece que nos enfrentamos a un nuevo desafío aquí. Y se que las alarmas del Padre y del Niño están sonando fuerte.

Padre: Claro que sí, ¿cómo vamos a confiar en alguien nuevo que ni siquiera conocemos? ¡Nuestra zona de confort es como nuestro refugio seguro!

Niño: Exacto, no quiero arriesgarme a más dramas y desastres. ¡Ya tuvimos suficiente de eso en el pasado!

Adulto: ¡Entiendo vuestras preocupaciones, pero también necesitamos ponerle ilusión a la vida! Si nos quedamos siempre en el mismo lugar, ¿cómo vamos a experimentar cosas nuevas y emocionantes?

Padre: Pero, ¿y si nos lastiman otra vez? No podemos permitirnos correr ese riesgo.

Niño: Sí, eso me da miedo.

Adulto: Tranquis, entiendo vuestro miedo, pero también necesitamos recordar que cerrándonos por completo a nuevas experiencias también nos estamos cerrando la puerta a la felicidad y al crecimiento personal.

Padre: Suena arriesgado...

Niño: Totalmente, me da escalofríos.

Adulto: ¡Pero hey, estamos en esto juntas! Podemos ser conscientes de los riesgos y tomar precauciones, y de esa manera podemos abrirnos a nuevas oportunidades que podrían hacer nuestras vidas mucho más emocionantes y llenas de aventuras. ¡Somos capaces de aprender y crecer con cada experiencia que vivimos! Sigamos vivas, viviendo!!!
Estados del Yo