martes, 3 de marzo de 2020

Recordando y Celebrando a Claude Michel Steiner por Keith Tudor



Estaba buscando publicaciones de Keith Tudor (Analista Transaccional Docente y Supervisor en psicoterapia) y he encontrado una en la que reflexiona sobre su difunto amigo Claude Steiner.
Tuve el gusto de conocer a Steiner hace muchos años en un taller sobre Juegos de Poder que realizó en Madrid, organizado por Francisco Massó. Era un taller de un fin de semana y resultó, cuanto menos, diferente.  La personalidad que describe Keith Tudor cuando dice “No importa lo que la gente pensaba de él, él caminó su discurso y lo vivió hasta el final de su vida” se percibía muy bien en su comportamiento durante aquel taller. Un alma libre y en coherencia consigo mismo, aunque eso pudiera “sorprender” al resto del mundo.

Podéis leer el artículo en: Recordando y Celebrando a Claude Michel Steiner

Todo el artículo es muy interesante, sobre todo por el reconocimiento de la gran aportación que Steiner le hizo al Análisis Transaccional y los datos que nos aporta Tudor, como alguien cercano a Steiner, sobre la coherencia entre sus ideas y la forma de vivir que mantuvo hasta su muerte.
Del artículo extraigo aquí, en este post, lo que su familia percibió como el último regalo que les hizo en forma de aprendizaje:
  1. No rescates. Al final de la vida, la persona que muere no debe participar en rescates, a pesar de que el triángulo del rescate puede ser como una trampa pegajosa y puede sentirse como imposible escapar. Sin embargo, uno debe liberarse de estas trampas pegajosas para morir en paz.
  2. Humildad. Claude estaba genuinamente perplejo e incrédulo de que la gente parecía preocuparse tanto por él y sus ideas e ideales. Dijo repetidamente: «No puedo dejar de preguntarme si realmente se están refiriendo a mí». Nosotros (su familia) no teníamos ni idea de lo ampliamente influyente e importante que era su trabajo profesional porque rara vez hablaba de sus conexiones con el mundo de esta manera. Presentó su posición en el mundo de la psicología como igual a todos los que lo rodeaban. En sus últimos días no tenía ego y era extremadamente humilde, y esto era una enseñanza para sus hijos.
  3. Disculpas. Él pidió tener tiempo privado con cada miembro de la familia y pidió ser perdonado por el daño específico y único que sentía que había causado a cada uno (sobre el cual él estaba en lo cierto y en el lugar). Él nos pidió compartir nuestros sentimientos con él, y él hizo terapia de alfabetización emocional para la familia en su último día
  4.  Música. A Claude le encantaba la música, y teníamos mucha música en su último día. Él lloraba y cantaba. Nos recordó que la belleza más dulce de la vida está justo delante de nosotros: simplemente escucha …




Descansa en paz, maestro.


No hay comentarios: